Seguramente ha oído hablar de los avances en el estudio del cerebro, ¿verdad? Ahora sabemos más que nunca sobre cómo funciona nuestra mente, cómo almacenamos recuerdos, aprendemos, y cómo las emociones impactan directamente en nuestro cuerpo. Y todo esto es clave cuando hablamos de salud, especialmente si se vive con ERC o con problemas urinarios.
Hoy, las neurociencias nos han demostrado cómo el cerebro y el sistema nervioso no sólo manejan lo que sentimos, sino también cómo nuestro cuerpo responde a esos sentimientos.
Para quienes padecen ERC, o cualquier otro tema de salud, es crucial saber que las conexiones neuronales pueden verse afectadas si su ánimo está apagado o si tiene pensamientos negativos que lo lleven a un estado de depresión. Si usted se deja llevar por estos sentimientos, la mente lo detecta y y puede empezar a sufrir problemas de memoria, dificultades en el lenguaje e incluso problemas visuales.
En las personas mayores, esto podría confundirse con temas que tienen que ver con la edad; sin embargo en ocasiones tiene más que ver con una predisposición, es por esto que una actitud positiva, una sonrisa en los labios y un ambiente sano juegan un papel importante para lograr un bienestar emocional.
Sea cual sea el problema de salud por el que esté atravesando lo primordial es que ponga de su parte y se ayude a sí mismo, empiece por cuidar su cuerpo como un templo: siga una dieta adecuada, manténgase activo, y olvídese del tabaco en caso de que sea fumador. Hágase chequeos regulares para vigilar niveles como la albúmina, glucosa, hierro, potasio y sodio. No deje pasar ninguna duda en sus citas médicas; preguntar siempre es bienvenido.
Pero aquí está la verdadera joya: las neurociencias también nos han enseñado que, si somos conscientes del poder de nuestra mente, podemos aprender a regular nuestras emociones con disciplina. No se trata de ignorar lo que siente, sino de entenderlo. Si experimenta tristeza, enojo, miedo o angustia, es normal. Pero con herramientas como la respiración consciente, el yoga, el pilates o una simple caminata, puede mantener esas emociones bajo control y tomar el mando de su salud.
Autoceptarse y asumir su padecimiento como parte de su nuevo estilo de vida, ser amable consigo y trabajar en su bienestar no solo mejorará su calidad de vida, sino que también hará que se sientas más fuerte y seguro. Y al final del día, ¿no es eso lo que todos queremos.